Amsterdam
Uno de esos primero viajes fuera de España sin organización ninguna aunque había comprado un libro-guía sobre Amsterdam que ayudó pero que no lo leí entero.
Cuando sales de España te das cuenta de que en pocos sitios (yo creo que solo aquí) usan persianas y eso que yo necesito oscuridad para dormir. Aquí en Amsterdam ni siquiera cortinas, al menos, la mayoría de ventas no tienen y de noche es muy curioso ver a al gente haciendo sus vidas.
La visita a la casa de Ana Frank la dimos por imposible por la enorme cola que había, falta de prevsión.
Como anécdota las mujeres en los escaparates del barrio rojo.
Si recomiendo hacer un paseo en barco por los canales, a ser posible escoger una compañía que tenga español, así te vas enterando de los que dicen aunque sea una grabación.
Durante el paseo vimos un barco velero de época que quisimos visitar pero fue imposible, una pena.
Los canales de Amsterdam es una de las cosas más típicas de Amsterdam y tienen su encanto, esos barcos/casas flotantes, a cada cual más curioso.