Visita organizada por el hotel (aunque esta vez si que hubo tiempo para disfrutar) a unas ruinas con otra pirámide que desconocía y que me llamó la atención, además que aún dejan subir hasta arriba (lo mismo que la de Cobá).

Si no se tiene vertigo merece la pena subir hasta arriba y tener unas vistas espectaculares.

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